miércoles, 2 de enero de 2013

Que Se Ponga de Pie la Verdadera Mujer Bíblica


Damos la bienvenida a un nuevo año y ésta es siempre una ocasión en la que, intencionalmente o no, almacenamos grandes expectativas. Por eso es sabio comenzar esta nueva aventura con el pie derecho antes de que nos veamos decepcionadas y defraudadas a mitad de camino por lo sureal de nuestras expectativas. Quizás algunas de nosotras tengamos que redefinir nuestro concepto de felicidad, feminidad, y hasta de espiritualidad, y por supuesto todo esto desde el punto de vista bíblico que Dios traza para que Su pueblo se encamine en la senda por donde debe andar para hallar la plena satisfacción mientras vivimos en este mundo temporal. Quiero entonces proponerte que leas el siguiente artículo que discute la definición bíblica de la mujer. Vamos a pedirle hoy a la Verdadera Mujer Bíblica que se ponga de pie y nos enseñe a ser todo lo que podemos ser en Cristo en nuestra vida presente y en este nuevo año que comienza.


Por Favor, Que Se Ponga de Pie la Verdadera Mujer Bíblica
Por: Gabrielle Pickle

Lentamente examiné las estanterías en la sección de mujeres de la librería Cristiana local, buscando un libro que hablara específicamente sobre la feminidad bíblica. Luego de casi una hora de infructuosa busqueda, descubrí que el tema de feminidad bíblica está intercalado a la fuerza entre la sección de matrimonio y la sección de paternidad.  Mientras que la sección de solteros - a la que justamente pertenezco - contiene libros sobre citas amorosas, soltería, y la lucha por la pureza. ¡Nada de feminidad bíblica por ahí! (Créeme, ¡revisé dos veces!) Yo entiendo que se trata sólo del sistema de organización que tiene la libreria, pero no puedo evitar sentir que eso refleja una parte significativa de la mentalidad cultural Cristiana: la feminidad bíblica es para esposas y madres, mientras que las mujeres solteras deben enfocarse en mantenerse puras y en casarse.
¡Ay! Me hace querer clavar mi tacón y gritar en desafío, "¡Las mujeres solteras también pueden ser bíblicas!" Aunque estoy segura de que tal comportamiento no es muy bíblico que digamos y sólo me traería como consecuencia que me echaran de la librería.

La Feminidad que honra a Dios

Cuando terminé de resoplar y jadear y lo pensé con detenimiento, lo entendí. No pienso que sea una adecuada interpretación de las Escrituras, pero puedo entender la confusión. La descripción de una "mujer bíblica" sí suena demasiado... casada.
En el hogar... criando hijos piadosos... honrando a tu esposo... manteniendo la casa...
...Enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus maridos y a sus hijos, a ser prudentes, castas, cuidadosas de su casa, buenas, sujetas a sus maridos, para que la palabra de Dios no sea blasfemada. Tito 2:3-5
Mujer virtuosa, ¿quién la hallará? Porque su estima sobrepasa largamente a la de las piedras preciosas. El corazón de su marido está en ella confiado, Y no carecerá de ganancias. Le da ella bien y no mal, Todos los días de su vida. [Paráfrasis] Ella: trabaja la lana, provee alimento para su familia, compra terrenos, se levanta antes del amanecer, cose vestidos, crea cosas, habla con sabiduría, ayuda al pobre, se interesa por sus siervas, cria a sus hijos. (Proverbios 31:10-31)

Pero yo no estoy casada. Entonces, ¿dónde encajo?
Estas descripciones de las Escrituras, tan exaltadas por la Iglesia, no son los únicos ejemplos en la Biblia sobre una feminidad que honra a Dios.¿Qué hay de Ana? La viuda devota, que invirtió su tiempo orando en el templo y que reconoció al bebe Jesús como el Mesías de las profesias (Lucas 2). ¿Y Dorcas? Quien consagró su talento en la costura para ayudar al pobre (Hechos 9). ¿Y María y Marta? Las hermanas que eran buenas amigas de Jesús. Pareciera ser que tal ves una o incluso las dos eran solteras (Juan 11). ¿Y que hay de Lidia? La acaudalada mujer que abrió las puertas de su casa para que los apóstoles se reunieran como iglesia (Hechos 16). ¿O Priscila? Una mujer sin hijos en su casa que ayudaba a su esposo a discipular nuevos creyentes y abrió las puertas de su casa para el apóstol Pablo (Hechos 18).
El matrimonio es bueno. La maternidad es buena. Ambos honran a Dios, y son en definitiva dos de los roles primordiales en los que las mujeres están llamadas a ser bíblicas.  Dios creó el matrimonio para un gran propósito. Pero él también creó la soltería para un gran propósito. Y las mujeres solteras están llamadas a ser mujeres "bíblicas" tanto como lo están las mujeres casadas. La feminidad bíblica es nuestro estándar para cualquier situación en la vida: solteras, casadas, divorciadas, o viudas. Cualquiera sea tu estado marital, ¡la feminidad bíblica se aplica! Así que aquí hay un par de pensamientos que tengo acerca de mi experiencia de "busqueda-por-un-libro-de-feminidad-bíblica-en-la-sección-de-solteros":

1. Recuerda que la feminidad bíblica es enseñada a traves de las Escrituras, y no solamente en pasajes que hablan sobre el matrimonio.
La amonestación de Pablo sobre la solteria se aplica directamente a la feminidad bíblica. En 1 Corintios 7:32-35 Pablo está apelando a la soltería porque ésta le permite a la mujer la libertad de estar enteramente, completamente enfocada en las cosas del Señor. Ella es libre de hacer de su relación con Dios su única preocupación --¡y eso es feminidad bíblica! Sin embargo, la mujer casada tiene las necesidades de su familia que ocupan la mayoría de su tiempo... Mientras que el Señor es su foco principal, su familia ocupa muy de cerca el segundo lugar---¡y eso es feminidad bíblica! Una verdadera y certera definición de la feminidad bíblica debe abarcar el todo de las Escrituras, no solamente Proverbios 31 y Tito 2.


2. Recuerda que los pasajes sobre la feminidad bíblica son para TODAS las mujeres--casadas o solteras.  
Sí, la mayor parte de los pasajes del Antiguo Testamento y del Nuevo Testamento que hablan directamente a la feminidad bíblica están escritos con la mujer casada en mente. ¡Pero es importante reconocer que la verdad encontrada en ellos también se aplica a las mujeres solteras! Proverbios 31 es una descripción para el rey Lemuel de parte de su madre sobre las características que debe él buscar en una futura esposa. Las chichas que él estaba considerando obviamente no estaban casadas aún. Eran solteras. Por lo tanto, la madre del rey Lemuel estaba aconsejando a su hijo que se fijara e identificara cualidades que serían evidentes en la vida de una mujer soltera--cualidades que demostraban que ella era una mujer "bíblica"--el tipo de mujer que también sería una buena esposa y madre.
Un esposo e hijos no son requisitos para la feminidad bíblica. Sí, son cosas buenas--cosas que Dios usa para Su gloria, avanzar Su Reino y santificarnos. Pero Dios también usa la soltería para avanzar Su Reino, para Su gloria y para nuestra santificación. Dios utiliza diferentes circunstancias, situaciones, y métodos para alcanzar esta misma meta primordial. El matrimonio no es un prerequisito para ser una mujer bíblica ni tampoco lo es para tener una vida que agrade a Dios.
No se trata del matrimonio o de la soltería, se trata de Jesús.

Se trata de Exaltar a Jesús

La feminidad bíblica se trata de una mujer que busca honrar a Jesús consistentemente aplicando las Escrituras a su vida diaria, como sea que esa vida luzca. Es tan sencillo como eso. Se aplica en todas las categorias. Por consiguiente, podría ser intercalada en todas las secciones que tengan que ver con la mujer en las librerías. Mujeres jóvenes, ancianas, solteras, casadas, divorciadas, viudas, lo que sea.
En cualquier estado o etapa de la vida que te encuentres, la feminidad Bíblica es llamado. No es algo que está confinado a las mujeres que buscan libros entre las secciones de matrimonio y paternidad. Permíteme decirlo de nuevo, tan alto como puedo hacerlo en una silenciosa librería: "La feminidad Bíblica se trata de exaltar a Jesús."

Por: Gabrielle Pickle
Publicado originalmente en ingles en el sitio web Girls Gone Wise un ministerio de la conferencista y autora de libros Cristianos, Mary Kassian.



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