viernes, 9 de abril de 2010

Esperando a David - Segunda Parte


Bueno, lo prometido, aqui está la segunda parte del articulo de Abbie, "Esperando a David". Una bendicion. Espero que lo disfrutes.

Para la primera parte, haz clic Aquí

Esperando a David - Segunda Parte


Mi pastor estuvo enseñando un tema que (irónicamente) pareció ir de mano con la tentación con la que yo estaba lidiando. La enseñanza estaba en I Samuel, y una cosa que dijo mi pastor se quedó conmigo. Él dijo, “No te conformes con el 2do o 3ero o tan siquiera con el 4to mejor, como lo hicieron los Israelitas. Por el contrario, ¡espera en el SEÑOR! Él hará grandes cosas, si somos pacientes.”
Súper, pensé, mientras garabateaba las palabras de sabiduría en la hoja de himnos que tenia doblada.
Luego, cuando buscaba una referencia en Proverbios, hojeé el libro de I de Samuel y mis dedos se detuvieron en el capítulo 25. Había avistado el nombre de Abigail. Siempre me gustó mi nombre, por nada menos que por ser el de esta matriarca de gran fuerza y carácter del Antiguo Testamento. No había leído su historia en mucho tiempo, y no pude evitar detenerme para revisarla otra vez.

Y en Maón había un hombre que tenía su hacienda en Carmel, el cual era muy rico

…Prometedor…

…y tenía tres mil ovejas y mil cabras. Y aconteció que estaba esquilando sus ovejas en Carmel. Y aquel varón se llamaba Nabal, y su mujer, Abigail…

…¡Comienzo a emocionarme con anticipación aquí; mi parte favorita está por venir!!

Era aquella mujer de buen entendimiento y de hermosa apariencia

BAM! ¿Super no? ¡Me pusieron el nombre de una mujer inteligente y Hermosa! ¡Que inspiración!

Infortunadamente, su vida se desarrolla mayormente en medio de la crisis.

pero su esposo era duro y de malas obras; y era del linaje de Caleb.

De repente, mientras mis ojos leían estas palabras tal como lo hicieron seguramente más de 20 veces antes, el equivalente de lo que sería el flash de un fotógrafo se disparó en mi cabeza.
La tentación de tomar los asuntos en nuestras propias manos es una que se prolonga por generaciones. Pareciera que Abigail podía haber experimentado, haber caído presa de la tentación, y haber terminado conformándose.

Conformarse con menos del maravilloso plan de Dios para su vida.

Conformándose con un cruel y malhumorado esposo, quien sin duda la trato como una simple ama de llaves y niñera.
Quizás Abigail fue la simple víctima de un desafortunado matrimonio arreglado. Eso es muy probable en ese caso. Pero cualquier sea la situación, ¡ella estaba pronta a ser arrebatada de su infeliz vida por un rey! ¡Imagina eso!

Si tan solo ella hubiera podido esperar. Si tan solo no se hubiera conformado.

Si tan solo hubiera reservado su corazón completamente para el hombre que estaba por venir. Un fiero y apasionado hombre, pero bueno. ¡Un hombre conforme al corazón de Dios! De distintas formas, cada uno, la nación de Israel y Abigail fallaron en esperar a David.

Como dije, he leído la historia de Abigail antes, muchas veces, aspirando ser como ella. Pero esta vez, entendí de corazón su trágico testimonio. Fue una lección difícil de entender, y no se nos dice cuantos años ella estuvo con su cruel y tosco esposo antes que David llegara valerosamente a su rescate. No sé qué tipo de cicatrices ella llevó, ni qué clase de remordimientos cargo consigo para siempre.
Lo que sí se… y lo que garabatee forzosamente en el estrecho margen de mi Biblia… es esto:

“Quiero esperar por David en lugar de conformarme con Nabal.”

¿Cuánto SEÑOR, debo esperar?
No importa hija, confía en mí.

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Abbie is 18, lives in the country with her weird and wonderful family, and tries to balance work, family, and her hobbies, while still feeding her voracious appetite for writing. As she grows toward God, she writes about the strange, hilarious and wonderful journey at her blog, Abbie Writes.
Note from Gretchen: After reading Abbie’s post, I was listening to Moody Founder’s Week on the radio and thought Janet Parshall’s message went along so well with the theme of not only waiting for David, but being a help meet to him. Janet describes Abigail as “the woman who changes the heart of the man after God’s own heart.” Click here to read the summary, listen to the message, or purchase the audio.
©2010 Young Ladies Christian Fellowship. All Rights Reserved.

2 comentarios:

  1. Muy bueno!! Así es!! Debemos esperar en El Señor!!!

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  2. Cielos!! el Señor me enseño exactamente LO MISMO cuando un chico mundano pendenciero me empezo a cortejar! que bueno es Dios que me libro de caer en las garras de ese Nabal! :DDD

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